Solo nos queda el corazón

Aunque las estadísticas no siempre lo reflejan, es evidente al llegar a nuestros espacios de trabajo que estamos atravesando tiempos difíciles a nivel social. En muchas ocasiones, es posible percibir en nuestros equipos una creciente inquietud por el futuro que se traduce en el mayor desafío para un líder: la desmotivación.

¿Cómo podemos hacerle frente a aquello intangible en un mundo donde el dinero ya no es motivación suficiente?

Hay buenas noticias: los momentos duros representan una de las más grandes oportunidades para replantearnos el tipo de liderazgo que queremos ofrecer y para sacar a relucir nuestras habilidades más poderosas: las humanas. La figura del líder que grita y vive al margen de las vivencias del resto de los trabajadores quedó obsoleta. Hoy, la ciudadanía busca y exige a las empresas que, a través de sus presidentes y líderes, contribuyan al bienestar social aportando dignidad, seguridad y confianza a las comunidades.

Tenemos el poder de reconstruir el tejido social transformando a nuestras organizaciones en espacios de inspiración, esperanza y crecimiento.

En mi nuevo video te cuento las cinco habilidades que considero esenciales para desarrollar un liderazgo conectado con las experiencias personales de tus colaboradores y los principales problemas sociales que enfrentamos en la actualidad.

Me encantaría que me cuentes en los comentarios cómo notás que repercute contexto global en tu equipo y de qué formas están mitigando el impacto.

Caro.